INGREDIENTES:
PARA LA MASA:
Harina: 400 gramos
Levadura de cerveza: 25 gramos
Azúcar: 1 cucharadita (de café)
Sal: 1 cucharadita (de postre)
Manteca: 25 gramos
Huevos: 2
Leche tibia: 3/4 de taza, aproximadamente
PARA EL RELLENO:
Jamón cocido: 150 gramos
Muzzarella cortada en fetas: 150 gramos
Cebolla chica cortada en Juliana: 1
Tomates sin semillas cortados en tiras: 2
Orégano a gusto
Sal y pimienta a gusto
PARA LA PLACA:
Manteca: cantidad necesaria
PARA PINCELAR:
Huevo: 1
PREPARACIÓN:
Masa. Colocar la harina y la levadura en la procesadora. Mezclar. Agregar el azúcar, la sal y la manteca. Procesar hasta obtener una mezcla homogénea. Agregar los huevos y la leche. Procesar nuevamente hasta formar una masa tierna que se desprenda del bol. Retirarla y ubicarla sobre la mesada. Estirarla hasta formar un rectángulo de 0,5 centímetro de espesor. Dividir la masa estirada en 20 rectángulos y, sobre ellos, distribuir el jamón cocido, la muzzarella, la cebolla y las tiras de tomate (sin llegar a los bordes). Espolvorear el orégano y salpimentar a gusto. Envolver el relleno con las piezas de masa formando paquetes. Presionar sus extremos y acomodarlos (con los cierres hacia abajo) en una placa enmantecada, dejando una separación de 2 centímetros entre uno y otro. Dejarlos levar en lugar cálido hasta que prácticamente dupliquen su tamaño. Luego, pincelarlos con huevo y cocinar en horno precalentado a temperatura moderada, durante aproximadamente 20 a 25 minutos, o hasta que estén dorados. Retirar los pancitos del horno y dejarlos entibiar sobre una rejilla de metal.
