INGREDIENTES:
500 gramos de mostacholes secos
Queso rallado, para espolvorear
Ciboulette picada, para decorar
SALSA BLANCA:
500 cm3 de leche
2 cucharadas de harina
1 cucharada de manteca
Sal, pimienta y nuez moscada, a gusto
SALSA PARISIENNE:
2 supremas de pollo
50 gramos de manteca
1 cucharada de aceite de oliva
1 diente de ajo
150 gramos de champiñones fileteados
50 gramos de jamón cocido
100 cm3 de crema de leche
Sal y pimienta, a gusto
PREPARACIÓN:
SALSA BLANCA:
Fundir la manteca, incorporar la harina y revolver con cuchara de madera hasta que la preparación burbujee. Agregar la leche y cocinar a fuego moderado, revolviendo permanentemente hasta que espese. Condimentar y reservar.
SALSA PARISIENNE:
Cortar el pollo en cubos y sellar en manteca y aceite. Salpimentar, incorporar el ajo entero para perfumar, agregar los champiñones, el jamón picado y por último la crema de leche. Incorporar a la salsa blanca reservada. Cocinar la pasta en abundante agua salada hirviendo, hasta que esté al dente. Colar la pasta y volcarla en una fuente para horno. Cubrir la superficie con la salsa, espolvorear con queso rallado y gratinar en horno caliente. Una vez dorada, retirar del horno, espolvorear con ciboulette picada y servir.
