INGREDIENTES:
Harina: 500 gramos
Polvo para hornear: 2 cucharadas soperas colmadas
Manteca a temperatura ambiente: 150 gramos
Azúcar impalpable: 150 gramos
Esencia de vainilla: 1 cucharada sopera
Yemas: 4
Leche: 125 cm3
Fruta abrillantada: 100 gramos
PARA PINCELAR:
Yema: 1
Leche: 1/2 pocillo (de café)
PARA LA CUBIERTA:
Azúcar molido: cantidad necesaria
OTROS:
Harina (para espolvorear la mesa): cantidad necesaria
PREPARACIÓN:
Tamizar la harina y el polvo para hornear en un bol. Reservar. En otro bol, integrar la manteca con el azúcar impalpable y la esencia de vainilla. Usar la espátula mezcladora de la batidora. Obtenida una crema y sin dejar de mezclar, volcar las yemas de a una. Integrar. Incorporar parte de los ingredientes tamizados a la mezcla anterior. Continuar mezclando a velocidad. Alternar con el agregado de la leche y mezclar. Seguir intercalando los ingredientes tamizados y la leche hasta completar la integración. Luego, adicionar la fruta abrillantada. Mezclar con la máquina. Pasar la preparación a la mesa enharinada y amasar. Formar dos cilindros de 5 cm de diámetro y cortarlos en segmentos de 3 cm de ancho. Disponer las piezas, separadas entre sí, sobre una placa limpia. Presionar con tres dedos, hundiendo levemente. Pincelar las piezas con una mezcla de yema y leche. Aplicar azúcar molido en la hendidura de las piezas. Llevar a horno suave de 25 a 30 minutos. Guardar las piezas en un recipiente hermético. Duran 20 días.