Voy a serte sincero. Cuando yo empecé a vivir solo, no me preocupaba demasiado de estos temas. Me gustaba más pensar en cómo íbamos a pasar el fin de semana mis amigos y yo, disfrutando de nuestra vida de solteros y organizando fiestas con cualquier excusa, en las que la moderación en la comida no era precisamente nuestro primer objetivo.
Pero con el paso del tiempo vas dejando atrás esos momentos. Cuando ves como tu vida va dando cambios, tus amigos solteros van dejando de serlo, y tu cuerpo te pide algo más de atención, empiezas a preocuparte un poco más por ti. El problema surge cuando este interés cada vez mayor por cuidarte choca con una cada vez mayor falta de tiempo, que nos impide dedicarle las atenciones necesarias a nuestra alimentación.
Si tú eres de los que creen que hoy en día es imposible tratar de conseguir una alimentación diaria saludable y que además se pueda preparar en poco tiempo, he de advertirte que eso no es del todo cierto. Está claro que tanto si vives sólo como si estás con tu pareja, a todos nos apetece llegar a casa y disfrutar de esos platos de siempre, hechos con mimo y con esmero, con ingrediente naturales y con una preparación cuidadosa y paciente. Desgraciadamente es mucho más habitual que tengas que utilizar tu escaso tiempo libre en comer productos congelados con escaso sabor, o realizar alguna escapada rápida al bar de la esquina. En ambos casos tu alimentación no será la más adecuada y, probablemente, la más económica.
Si realmente Ansías empezar a cambiar esta dinámica, Deseas comer de una forma inteligente y Quieres empezar a cuidar tu cuerpo, tendrás que empezar por cambiar de mentalidad. Quizás ese cambio pueda resultar para ti más difícil que para otras personas, pero estoy seguro de que al final habrá valido la pena.
Da igual la edad que tengas, si vives sólo o en pareja. Si lo deseas puedes conseguir comer sano, comer bien, y hacerlo en poco tiempo. Para ello es necesario que te pongas manos a la obra y empieces a buscar la forma de conseguirlo. Y es aquí donde quiero detenerme para hablarte de dos de los mitos que siempre nos han acompañado, y que son muy perjudiciales.
– No Todo El Mundo Puede Hacerlo: Olvídate ya de eso de “ es que yo no tengo mano para la cocina”, y sobre todo de “es que esto es cosa de chicas”. Esto tiene que quedarte muy claro; Cualquier Persona Puede Cocinar, Y Cocinar Bien. La cocina de hoy en día nos permite cocinar platos sabrosos y nutritivos de una forma muy sencilla. Todos podemos cocinar; hombres, mujeres, y hasta los niños pueden realizar labores que no supongan ningún peligro y que les vayan enseñando a valerse por sí mismos.
– Los Buenos Productos Son Muy Caros: Debes aprovechar en cada momento aquellos alimentos que estén en el mercado y que te den las máximas garantías de calidad al mejor precio. Pero si por falta de tiempo no puedes estar pendiente de donde compras, estoy seguro que cerca de ti encontrarás lugares que tengan cualquier tipo de alimento en todas las épocas del año. No es necesario buscar siempre lo más caro. Puedes encontrar productos que te aporten los mismos beneficios y con un precio mucho menor. Pregunta a los que saben, utiliza tu imaginación, y encontrarás soluciones sanas y económicas para realizar cualquier receta.
Una vez que tengas superados estos dos conceptos, y estés dispuesto a mejorar la calidad de tus comidas necesitarás una serie de consejos, muy básicos y fáciles de seguir, con los que conseguirás organizarte mejor y aprovechar de una manera eficaz el poco tiempo del que dispones.
De esta forma conseguirás que “Comer Bien” ya no sea incompatible con “Comer Rápido”.
Pero esto forma parte del contenido de mi próximo artículo, que muy pronto tendrás a tu disposición en estas páginas