INGREDIENTES:
2 kilos de manzanas verdes
Azúcar: cantidad necesaria
1 cucharadita (de té) de glucosa
2 cucharadas soperas de gelatina sin sabor
1/2 pocillo de agua
1 cucharadita (de té) de jengibre fresco rallado
PREPARACIÓN:
Lavar el limón y el jengibre, cepillándolos, y las manzanas. Pelar las manzanas, sacarles las semillas y picarlas. Colocarlas en una cacerola, taparlas y cocinarlas a fuego suave hasta que estén muy tiernas. Retirarlas y pasarlas por la procesadora. Pesar el puré obtenido. Calcular 600 gramos de azúcar por kilo de puré de manzana, y poner ambos ingredientes en una cacerola. Cocinar, revolviendo continuamente, hasta que la mezcla esté espesa y se pueda distinguir el fondo de la cacerola. Incorporar la glucosa sin retirar la preparación del fuego. Mezclar muy bien. Hidratar la gelatina en el agua, agregarla a la mezcla y revolver hasta que esté completamente disuelta. Por último, añadir la cucharadita de jengibre. Distribuir la preparación en pequeños moldes espolvoreados con azúcar y refrigerarla en la heladera durante 3 horas, como mínimo. Pasado ese tiempo, retirar los moldes de la heladera, pasar un cuchillo húmedo por sus bordes internos y desmoldar los dulces.